Algunos niños  presentan dificultades con la ejecución de gestos y movimientos que no se aprenden culturalmente por educación,  sino que llegan naturalmente con el tiempo y la maduración, como andar, correr, saltar o marcar el ritmo con el pie, por lo que se puede pensar que tienen trastornos psicomotores. Estos niños presentan dificultades para coordinar sus brazos y piernas para nadar, los pies al momento de correr y les cuesta trabajo mantenerse en equilibrio sobre un solo pie.

El oído no es únicamente un órgano sensorial que recibe sonidos, tiene también una función motriz, ya que en él se encuentra un órgano interno llamado el vestíbulo, cuyo papel es  dirigir los mecanismos del equilibrio. Por estar asociado con varias otras partes del cerebro, el sistema vestibular desempeña un importante papel sobre los mecanismos de la coordinación y el ritmo. Por su asociación con el córtex, el vestíbulo está involucrado en la capacidad de navegación espacial y la conciencia del esquema corporal.

 

El Método TOMATIS® actúa directamente sobre el vestíbulo, lo que permite regular el tono muscular, la verticalidad y la lateralidad. Es también eficaz en los trastornos del ritmo y la coordinación, así como en las dificultades de percepción espacial y del esquema corporal, o consciencia del propio cuerpo en relación con el espacio y objetos y personas.